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lunes, 25 de julio de 2011

Pasaporte

A veces creía que explotaba cuando llovía, pero la verdad nunca fue así. Mi opinión cambió hace unos 5 años cuando intentaba destapar un agujero que me llevaría a la mismísima tierra de las cintas de colores, es una locura, lo sé, sin embargo hay algo dentro de ella que permanece justo en el  límite de la felicidad. Nadie tuvo que pagar por ella. Es alentador cuando no tienes nada que hacer y piensas en ello. Una vez caí en ese pozo, era oscuro al principio, luego me acostumbré y posteriormente vi cintas de colores, ¿quien podría creerme?, nadie ha caído tan profundo en estas tierras, la mayoría avanza, algunos atletas la saltan, dejando ver sus cuerpos fuertes y esculpidos, miran con la frente en alto como si no hubiesen dejado nada atrás. Ellos vuelven en algún punto, tal vez sea en el mundo de los sueños.
Esta vez el mundo de los sueños es mio, no lo compré, creo que lo adquirí en algún tipo de concurso, en ese tipo de concurso donde todos los participantes se llevan algo sin importar lo que sea. Recibí un cartón que me aseguraba haber adjudicado el mundo de los sueños. En el contrato había un párrafo con letra pequeña que me obligaba a vivir en este mundo de los sueños, por supuesto yo no estaba al tanto de dicho requerimiento asi que lo acepté...lo demás es sabido.
Mi mente es como un queso emmental. A medida que pasa el tiempo voy borrando recuerdos de la realidad dejándome burbujas de dióxido de carbono ahí. Cuando esas burbujas chocan, provocan un crash! en mi interior desencadenando algo que llamo "materia prima de dudosa procedencia para escribir asuntos incoherentes" estos asuntos son una metáfora de los que un día viví, es decir, los asuntos que se van borrando de mi cabeza van directo a un proceso que se llama metaforización, se codifica el mensaje coherente, luego pasa por unas maquinas a vapor, que condensan las letras. El agua se recolecta para regar flores y con el polen de las flores se escribe un nuevo asunto, esta vez, incoherente. Tal vez sea metafórico, pero queda archivado en asuntos incoherentes, es como una constancia de que alguna vez tuviste algo distinto a el premio del concurso. En fin... esto es todo un pasaje de ida, el pasaporte es destruido cuando llegas.

domingo, 17 de julio de 2011

Recomienzo

Pasada la medianoche haré una fogata en tu pecho invernado
vendrá la pirotecnia iluminandome cuando estes lejos.
Debajo de estas lineas están.
El debido acto de silenciar lo que no se quiere oir.
El mismisimo espanto que contengo en mi estomago
es suficiente para palidecer y sudar helado a cada quien quiera ver,
pero no es suficiente para debilitarme en totalidad o quitarme el velo negro.
Escribe sobre mi piel antes de esta medianoche
para recordar ese sabor a sentimientos,
que será artificial como el jugo de limón envasado,
pero ayudará más que la obvia fotografía guardada en la caja del tiempo.